quinta-feira, 6 de julho de 2017
"La irreversibilidad del tiempo" (...) 352
En la vida y en el tiempo en que vivimos, es hábito la "propensión y la facilidad" para denigrar a otros de ánimo ligeros por el placer subyacente en algunas personas.
Tal vez por el "valor" aliado a una cierta idiosincrasia latente que en determinadas personas es visible por su comportamiento y exención.
De ahí que hace toda la diferencia en otras personas que se comportan de otro modo, diametralmente opuesto a las reglas y al dictamen social, según ellas, el "vale todo" es viable y socialmente correcto.
Así, la forma abreviada en cómo se llegó a cierta evidencia, no es algo que se puede esperar lo contrario, hay personas que se comportan de esta forma, no es mera casualidad sino una especulación fortuita.
Si tenemos en cuenta que la dignidad de "alguien" es la particularidad del carácter moral y social valor intrínseco de cada uno.
De hecho es previsible, y así sucede porque hay ciertas personas, que utiliza la "desinformación", en lo que se refiere a otras personas, un hechizo con la intención de una finalidad para "acostarse abajo" a otras personas.
Tienen una visión superficial, un esbozo que traza el bello placer con el fin de perjudicar, objetivo que alimentan, por la conspiración, además patente en personas mal formadas.
Estas reflexiones constatadas por una gran mayoría de personas que, saben existir cierto conflicto, sin embargo, optan por ignorar.
Ciertamente, porque estas están cansadas con la "letanía" prefieren el anonimato y hacer que "no pasa nada".
La vida práctica de las personas es la que se ejercita todos los días, una rutina que se lleva adelante, la casa, el trabajo, las relaciones sociales.
Porque estas relaciones tienen un impacto positivo, y se valoran en todo lo que hacen que es demostrado por sus actos y acciones.
Hay transformaciones en las personas para mejor, que será deseable que así suceda, un designio implícito en la humanidad.
El perfeccionamiento en un ámbito general, pasando por sí mismo, es "sobrellevar", no es una actitud pretensiosa, sino de calidad de carácter.
En la expectativa de que nuestro discurso pueda dejar más algunas consideraciones sobre el tema la "irreversibilidad del tiempo". Antonio Cardoso
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